Ilustración portada del libro
Hecho el recorrido, cuidadosamente, de las páginas de “amanecer alado y otros cuentos” del autor Fernando Vásquez, me siento satisfecho por los joyas encontradas, esas gemas que hacen a un lector agudizar los sentidos dejándose sorprender por la armonía de las palabras tejidas en líneas de manera sutil. Lo encontrado en esta lectura es como un rayo de luz cual saeta que penetra hasta lo más recóndito de los intersticios soterrados y oscuros pasajes de la existencia de un buen lector, para ofrecer a la mesa unas maneras de ser, de estar y de hacer. Son esas voces que convergen las que contribuyen, de manera didáctica, al crecimiento lector. Cuentos pensados muy al estilo de “Borges” que ofrecen un abanico de posibilidades constructivas en todos los sentidos y que a través de una mediación sutil comprime, además de sus historias narradas; un sinnúmero de huellas, pistas e indicios de referentes bibliográficos, al igual que técnicas narrativas. Todos estos elementos puestos en un libro donde confluyen veinte cuentos para disfrutar y degustar, que dejan entrever la filigrana del arte escritural narrativo. El libro, en su conjunto, es una “preparación del alma [y todos los sentidos] para lo desconocido” (Vásquez, 2018, p. 23). Como esa Josefina, que sale a la caza de un nuevo amor y se reencuentra con su amado, ese presentimiento que la lleva de vuelta a casa.
En tal sentido, a través de cada uno de los cuentos, en especial “en la penumbra” cada palabra puesta allí es una “compacta carga de sentido”. Es ese decorado cargado de complejidad determinado por un espacio-tiempo de la conciencia. Esa misma que lleva al lector por los vericuetos de técnicas narrativas potentes a manera de dispositivos que esculpen cual escultura a través del cincel escritural. Como dice el autor “lo que es verdadero a la luz de la lámpara”; esa mirada sesgada, de túnel, “no siempre lo es a la luz del sol”; las bifurcaciones, posibilidades infinitas para determinar, no una, sino muchas verdades vistas desde la claridad descollante del saber, ese sol centelleante.
Por estos detalles y muchos más es que, a manera de notas, quiero compartir algunos de mis subrayados realizados luego de cumplida la relectura de este libro. Lo que quiero es compartir a mis lectores del blog esa cosecha de palabras para celebrar, quizá, ese gusto particular por la literatura y sabiendo que la lectura agudiza los sentidos y prefigura unas maneras escénicas del pensamiento, comparto una de ellas con palabras puestas en la escena de lo escrito.
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“el milagro no habita en uno si no se aprende la pasividad”
“Franz Biber: su música es como una lenta preparación del alma para lo desconocido”
“sabes que la clave del misterio es la confianza del que lo espera”
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“mi amor por ti aumenta cuanto más lo callo, así que al confesártelo te estoy amando menos”
“lo mejor de no poder tenerte es que disfruto tu ausencia todo el tiempo”
“eres tan bella que cuando te miras en el espejo, él no sabe si reflejar la hermosura de tu cuerpo o las formas esbeltas de tu alma”
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“me he pasado la vida afilando la espada. Y ahora, cuando me enfrento a la muerte, la desenvaino, y he aquí que la hoja está rota” (relación de la vida con la espada)
“las flores que caen de los árboles son como mariposas muertas”
“los pájaros enjaulados tienen la misma tristeza del viento silencioso”
“las cosas no están desligadas. El universo es un conjunto de relaciones. Los cielos y la tierra se alimentan mutuamente. Por eso me habéis escuchado decir que con el néctar de las flores la mariposa se perfuma y también que los ojos de los peces son lágrimas congeladas al ver partir la primavera. Todo está conectado. El cosmos infinito es una música de equivalencias y correspondencias”
“por eso me habéis oído insistir en la necesidad de cualificar nuestros sentidos para sentir o percibir la armonía presente en el universo o para descubrir las analogías entre las cosas”
“¡Cuántas cosas sabríamos si aprendiéramos a mirar la luna! ¡Cuánto entenderíamos los dementes y develaríamos algunas costumbres de los lobos! ¿Por qué los lobos le aúllan a la luna? ¿Qué saben los lobos de la luna que nosotros no sepamos?”
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“así uno viva muchos años con una mujer, ella sigue siendo absolutamente desconocida para uno” “las mujeres viven en varias dimensiones a la vez”
“lo que pasa es que [las mujeres]están hechas de un vacío que nadie puede completamente llenar. Yo conozco a alguien que, siendo feliz con su marido, se las ingenia para desaparecérsele de vez en cuando. Y no es porque no lo quiera, sino porque hay un espacio que el marido no puede colmar.”
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“si algo he pretendido hacer es convertirme en un artesano de las palabras” “mi aspiración es que cada palabra estalle como una compacta carga de sentido”
“tus ideas son como acostumbras tener la punta de tus lápices, siempre afiladas.””el escritor que no ha torturado sus frases tortura al lector”
“Refiriéndose a La Bruyére: si la vida es miserable, resulta penosa soportarla; si es dichosa, es horrible perderla. En ambos casos es lo mismo”
“la gloria de ciertos hombres es escribir bien, y de otros, no escribir en absoluto”
“los vicios entran en la composición de las virtudes como los venenos en la composición de los remedios”
“En mi memoria seguía reverberando un escolio que cuando lo leí, de inmediato lo volví parte de mis principios literarios: escribir bien consiste en describir una curva mediante el menor número de tangentes”
profejesusolivo 